Hoy ha sido un día con mucho estrés para Miriam, a sus 36 años tiene un embarazo de 34 semanas y comenzó con contracciones uterinas frecuentes. Carlos, su pareja la llevó urgente al centro de salud, en donde la dejaron internada y el médico al ver su ficha clínica, encontró que tenía antecedentes que mostraban la presencia del Virus del Papiloma Humano (VPH).
Un estudio reciente ha mostrado que las mujeres embarazadas que se infectan con algunas de las cepas del virus del papiloma humano (VPH), pueden presentar un riesgo mucho mayor de tener un parto prematuro.
¿Qué es un parto prematuro?
Se llama parto prematuro al que ocurre antes de las 37 semanas, comúnmente se les llama a los que nace a los 6 o 7 meses, sin embargo, medicamente es más exacto hablar en semanas de embarazo, lo que permite ser más efectivos en el manejo del embarazo. En general los bebés que nacen en forma prematura pueden sufrir complicaciones graves de salud, sino son tratados por los especialistas.
¿Qué hacer frente a un parto prematuro?
Lo fundamental es que los padres tengan conocimiento de las semanas de gestación que tiene él bebe, si se presentan contracciones frecuentes antes de las 37 semanas, llame a la matrona o al médico informando la situación en que se encuentra. Si las contracciones son muy seguida ir al centro asistencial más cercano, para ser atendido por los profesionales adecuados. Recordar que los profesionales saben qué hacer en estos casos; dando reposo si es necesario, indicando algunos medicamentos con el fin de retrasar el parto hasta lograr la madurez del bebe, puede ser necesario el uso de antibióticos o corticoides.
¿Cómo prevenir la enfermedad?
El VPH es la enfermedad de transmisión sexual más común actualmente en todo el mundo. Es tan frecuente que casi todas las personas sexualmente activas contraen el virus si no se vacunan contra el VPH.
Las mujeres con una infección recurrente con el virus del papiloma humano (VPH), tienen más probabilidades de dar a luz en forma prematura, en comparación con las mujeres sin infección con el virus (VPH).
La prevención es por una parte mantener un control frecuente con el Papanicoláu (PAP), sin lugar a dudas la mejor alternativa es la vacunación, consulta con tu médico para que te prescriba la vacuna si fuera necesaria.